La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó este miércoles el proyecto de ley fiscal impulsado por el presidente Donald Trump, conocido como “El Gran y Hermoso Proyecto de Ley”. La iniciativa, que ya había sido avalada por el Senado, regresará ahora al despacho del mandatario para su firma, prevista antes del 4 de julio.
El proyecto fue aprobado por 218 legisladores republicanos, mientras que dos miembros de ese mismo partido se sumaron a los 214 demócratas que votaron en contra. La aprobación se dio pese al intento del líder demócrata Hakeem Jeffries de retrasar la votación, con un discurso de ocho horas y 44 minutos, la intervención más larga en la historia de la Cámara Baja.
El plan propone hacer permanentes los recortes fiscales aprobados durante el primer mandato de Trump (2017–2021), e incluye un impuesto del 1% a las remesas enviadas desde Estados Unidos. Además, contempla una exención de hasta 25 mil dólares anuales en impuestos federales sobre las propinas hasta 2028, medida presentada como un beneficio para la clase trabajadora.
Sin embargo, el proyecto ha generado fuertes críticas por su posible impacto fiscal. Se estima que la medida podría costarle al Estado entre 4 y 4.5 billones de dólares en ingresos durante la próxima década, y elevar el déficit actual —de 1.1 billones— en otros 3 billones, lo que ha provocado divisiones incluso dentro del bloque republicano.
Los demócratas advirtieron que el plan afectaría programas sociales como Medicaid, del que dependen unos 80 millones de estadounidenses. “Este proyecto costará vidas”, señalaron desde la oposición.
Trump, por su parte, celebró la aprobación a través de su red Truth Social, asegurando que el plan representa “el mayor recorte de impuestos de la historia” y una forma de “dejar de castigar a las familias trabajadoras por las malas decisiones de Washington”.
